C+U+A+R+E+S+M+A, mucho más que ocho letras.
Cuando llega este tiempo a todos nos motiva el hacernos propósitos y hacer cosas para que sea un tiempo especial. Pero no nos podemos quedar en intenciones, sino que hemos de vivir lo que sabemos que es necesario en nuestra vida, sin ningún tipo de aplazamiento
Una vez que hemos descubierto lo que Dios nos quiere, no nos podemos resistir a reconocernos necesitados de su amor. Para ello hemos de volver a dejar todo lo que se pego a nuestra persona, a nuestro corazón, a nuestras manos, que nos imposibilita el disfrutar de cuánto Dios nos quiere.
Andando así por la vida, por este tiempo especial, encontraremos con mil situaciones cotidianas que seguro las podemos vivir de una forma nueva, no voy a poner ningún ejemplo, pues todos sabemos cuales pueden ser los ejemplos en nuestras vidas.
Recemos con más insistencia, hagámoslo con más tiempo, ofrezcamos nuestra oración por tantos que no saben que Dios les sigue esperando, busquemos mil razones para tener amistad con Dios, no nos cansemos de confiar en Él.
Esperan mucho de ti en esta cuaresma, en primer lugar Dios, después cuantos te rodean. Ninguno te va a decir nada, pero tú si le puedes decir, ofrecer, servir, acompañar, escuchar, animar, agradecer...
Siente la alegría de la misericordia, date cuenta de la necesidad del perdón, disfruta del que Dios te ofrece, valora el que otros necesitan de ti y regálalo. Cuando el perdón entra en ti, te transforma, te plenifica y tu puedes sentir, con una confianza inmensa, como es el Amor de Dios y el amor de los demás.
Más que privarte de cosas esta cuaresma, busca dentro de ti lo que hay y cómo es necesario que lo transformes, pues en la transformación esta la nueva vida. Cuando nos privamos de algo que tenemos a nuestro alcance, sabemos que cuando pase este tiempo sí lo vamos a poder tener, y eso es solo un juego con el tiempo. ¡No pierdas el tiempo!
Amar es lo único que hizo Jesús, Amar es lo único que te pide a ti, Dios, Jesús,
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